Yo me siento en mi máquina, pongo mi tablet, veo noticias, veo diseños, informaciones, cosas así, busco prédicas, escucho cosas bonitas y me entretengo mientras estoy trabajando. Después llega mi marido en la tarde. Lo tengo que atender. Él llega, se acuesta, porque los hombres viven cansados. Nosotras nos levantamos trabajando, nos acostamos ordenando la casa y pensando qué vamos a hacer el otro día. Ellos van a la oficina, trabajaron, llegaron cansados, se acuestan o se ponen a ver el fútbol… (Mujer de 67 años)